Hoy me desperté con una noticia que me sacó una sonrisa y me hizo rememorar a mi infancia: La famosa muñeca Barbie ahora tiene cuenta de Instagram en la que "se fotografía e interactúa" como si se tratase de una persona común y corriente. Pero ella es mas que eso, es un elemento en común de la infancia de muchas de nosotras, víctima de cortes de pelo, escrituras y todo tipo de alteraciones que solíamos hacerle en pos de personalizar nuestra muñeca favorita y, sobre todo, estereotipo de la mujer perfecta.
Esta novedad virtual de Barbie muestra claramente la adaptación de las grandes marcas a la realidad actual, convirtiendo a la íconica rubia en una más de todas nosotras y, de alguna manera, en un par nuestro. Barbie se fotografía como las bloggers y figuras del ambiente de la moda, en atractivas poses y con acercamiento a los detalles, cambiando la experiencia de juego y magia que conlleva su nombre.
Antes, las publicidades nos contaban que Barbie se casaba con Ken, tenían un bebé junto a su perro y gato y se dedicaba a pasear con Kelly en su Jeep rosa por las playas hasta llegar a su casa de fin de semana. Hoy, Barbie cuenta un relato distinto del estereotipo de mujer ideal de la época: Es independiente, trabaja y decide mostrarse al mundo como le gusta, sin importarle más nada.
Mas allá de las críticas al cuerpo de la muñeca, creo que vale remarcar esta modernización en pos del cambio social del rol de la mujer. Tal vez mi análisis sea demasiado profundo y la intención detrás de todo esto sea puramente comercial, pero me gusta pensar en un mundo que evoluciona constantemente.
Vale agregar que, en los próximos días, Barbie mostrará en su cuenta su paso por las semanas de la moda alrededor del mundo como si fuera una asistente más a este maravilloso universo. ¡No se la pierdan!